El proyecto buscó plantear propuestas prácticas de política pública que permitan la reducción de la informalidad laboral en el Perú. Para esto, en el estudio se reconoce que si bien la informalidad se reducirá en la medida que la economía se expanda y el país se desarrolle, los niveles de informalidad que Perú exhibe son más elevados de lo que le correspondería dado su nivel de desarrollo. Por ello, incluso en el corto plazo existe espacio para reducir al menos diez puntos porcentuales de informalidad adoptando medidas de política pertinente. En este marco, inicialmente se realizó una discusión conceptual desde varios puntos de vista para luego, en un siguiente momento, implementar un diagnóstico de la informalidad laboral en el Perú, principalmente de trabajadores dependiente de algún empleador, y donde esta se concentra. Seguidamente se analizaron los factores que están detrás de este problema, más allá de los que son típicamente identificados en la literatura. Dentro de estos se consideraron factores asociados a la legislación laboral, la legislación tributaria y la política social. Finalmente, el trabajo concluyó con recomendaciones para reducir o eliminar el efecto de los factores analizados sobre la informalidad.