El objetivo de la consultoría fue diseñar e implementar la línea de base del “Plan para la prevención de la anemia y desnutrición crónica infantil en 53 distritos focalizados del Programa Juntos 2017 – 2019” así como diseñar la estrategia de evaluación de impacto del plan. El estudio fue contratado por el Banco Interamericano de Desarrollo y desarrollado en coordinación con el Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social. La investigación implicó estudiar las características socioeconómicas de los hogares, el estado nutricional de los niños, las prácticas saludables en el hogar, la identificación de brechas de acceso a los servicios públicos (atención en salud, acceso a agua segura y saneamiento) y la seguridad alimentaria en los hogares. Para llevar adelante el estudio se recogió información de 1,281 observaciones 639 en el grupo de tratados y 642 en el grupo de control, distribuidos en aproximadamente 160 centros poblados. Los principales resultados arrojaron que la incidencia de anemia afectaba al 77% de los niños mayores de 6 meses del grupo de tratados y 67% del grupo de control. Asimismo, se encontró que el 20% de los niños menores de 5 años del grupo tratado sufren de desnutrición crónica, siendo la incidencia de 15% en el grupo de control. Sobre la base de los resultados se sugirió un diseño de evaluación que explote un panel longitudinal a nivel de individuos para poder controlar por este posible desbalance en características observables y no observables de la muestra incluyendo efectos fijos a nivel de individuo.
